El suero lácteo es un subproducto de la elaboración de quesos que se obtiene luego de la cuajada. Es la fracción de leche, de cualquier especie animal, que no precipita y representa aproximadamente el 90% de la misma. El suero contiene principalmente lactosa, proteínas, lípidos y sales minerales. También posee ácidos lácticos y cítricos y compuestos nitrogenados.
El lactosuero es muy contaminante si se vuelca sin tratamiento a cursos de agua o sobre el suelo dado que posee una alta carga orgánica, con un rango de demanda biológica de oxígeno (DBO) de entre 20 y 40 kg/m3. El suero sin tratar produce en los cuerpos de agua un desbalance de oxígeno disuelto que es consumido en la degradación de sus componentes orgánicos, y en el suelo puede descompensar el equilibrio de nutrientes.
El destino del suero puede dividirse en tres categorías:
-Alimentación: sin tratamiento, desnatado o concentrado
-Aprovechamiento industrial: fraccionamiento de componentes con filtros de membrana con recuperación de proteínas, lactosa y sales minerales, entre ellos: suero en polvo, suero en polvo desmineralizado, lactosa de grado alimenticio y concentrados proteicos. Este aprovechamiento se da en fábricas de gran escala de producción.
-Tratamiento en planta depuradora. Esta alternativa se da generalmente en queserías pequeñas.
Así como el sector lácteo, los rubros alimenticios, textil, curtiembres y papeleras, son generadores de importante residuos orgánicos. La misma característica que convierte en contaminante a los residuos orgánicos, su alta carga orgánica, favorece su utilización como insumo para la generación de biogás, ya que este se produce precisamente por la fermentación de la materia orgánica.
El biodigestor junto con los procesos y equipamientos complementarios componen los llamados “Sistemas de biogás”, los cuales tienen distintas conformaciones de acuerdo a la tecnología, al sustrato y a los resultados buscados. En general están conformados de la siguiente manera:
El biogás es único entre las fuentes de energía renovable en cuanto a las opciones de uso, ya que tiene la ventaja de poder utilizarse para producir energía térmica, electricidad y para el transporte en forma de gas comprimido.
El suero de queso es un recurso valioso que hoy en día es aprovechado en muy pocas ocasiones. La utilización del mismo para la generación de energía es una nueva opción que debe comenzar a considerarse ya que puede resultar en grandes beneficios para el productor de queso.
Como se indicó anteriormente el suero de leche posee una elevada carga orgánica, es por ello que para obtener valores de vuelco que cumplan con los exigidos por el ente Regulador de Servicios Sanitarios y la secretaría de Medio Ambiente un único tratamiento no es lo más recomendable ya que las medidas del reactor tomaría valores muy elevados y realizar el tratamiento no sería viable económicamente, por ello una alternativa factible es la implementación de un sistema combinado, el cual permita en primer instancia la obtención de energía renovable seguido de un segundo tratamiento aeróbico (barros activados, lechos percoladores, etc.).
En base a la experiencia se ha comprobado que el efluente tratado (suero tratado) a la salida del proceso anaeróbico disminuye sus valores de DBO en un 90%, quedando en valores entre 2000 y 4000 mg/L, de allí es redirigido mediante un sistema de bombeo al segundo tratamiento, pero ahora aeróbico, donde logra alcanzar los valores de vuelco exigidos, estos pueden variar entre 50 y 200 mg/l, según el tipo de cuerpo receptor final.
Autor: Ing. Diamela Grosso
Ingeniería Siri Consultora S.A.
(*) Fueron consultadas varias fuentes, como ser: INTI, «Producción de biogás con suero de queso (autor: Francisco M. Hernandez), entre otras.